Las hipótesis sobre OVNI

Todas las hipótesis

Por: Willy Smith


En tiempos quizás más felices, cuando todos los que nos interesábamos en el fenómeno OVNI eramos amigos, las cosas eran mucho más simples. Lo que se debatía entonces era la existencia misma de los platillos volantes, y aquellos que la negaban simplemente ignoraban graciosamente a los "creyentes", tolerándoles en forma amigable, pero casi nunca atacándoles verbalmente.

Las hipótesis desarrolladas con los años han evolucionado de esta situación con la diferencia de que hoy día las pasiones predominan, y los proponentes de diversas ideas no aparecen dispuestos al debate abierto y racional. En vez de analizar la casuística, la selección de casos esta determinada por las ideas que se creen correctas, pero en lugar de presentar argumentos en favor de las mismas, los autores se concentran en atacar acerbadamente las explicaciones de los demás.

El resultado neto de todo esto es una confusión considerable, y aún aquellos que se supone están bien informados a veces delatan su ignorancia en lo que escriben, revelando sus preferencias personales. Las hipótesis con las que no están de acuerdo, simplemente no existen.


Las dificultades básicas

Dos problemas han contaminado ufología desde sus comienzos, a saber:

(i)La falta de una definición precisa del fenómeno aceptable a todos los ufólogos. Numerosas definiciones de lo que son los OVNIs han sido propuestas por algunos investigadores. y como era de esperar, duramente criticadas por todos los demás.

Desde luego, para estudiar un fenómeno cualquiera es esencial definirlo adecuadamente, para así poder recoger una muestra representativa del mismo. En el caso concreto del Proyecto UNICAT, la definición usada es la propuesta por el Dr. Hynek:

Un informe de la percepción, en el cielo o sobre el suelo, de un objeto o una luz cuya apariencia, trayectoria, comportamiento dinámico y aspectos luminosos no solo no sugieren una explicación convencional y lógica a los testigos, pero que permanece sin identificar cuando individuos técnicamente idóneos examinan toda la información disponible.

En una obra reciente, el Dr. Vallée ha puntualizado una de las limitaciones de esta definición, que en principio postula la existencia de un grupo técnico con la sabiduría necesaria para separar el trigo (UFOs) de la paja (IFOs). Vallée parece dudar que ese grupo pueda existir, pero si asi fuera, la crítica solo recalca la necesidad de crearlo, y no invalida la más precisa definición que tenemos.

ii) El segundo problema es la tendencia de los ufólogos a formular hipótesis sin estudiar la información, seleccionando la causuística de acuerdo a ideas preconcebidas. Invirtiendo el orden del proceso científico, las explicaciones son propuestas primero, y los casos que las favorecen son seleccionados a posteriori. Quizás esto se deba a que la mayoria de las personas que se interesan en el fenómeno OVNI son diletantes sin preparación científica. Es interesante señalar que la ufología es una actividad en la que, como en la política, no se considera necesaria una preparación previa.

Esto no implica que credenciales académicas o títulos universitarios sean un requisito imprescindible para dedicarse a la ufología. Pero es innegable que como resultado de su preparación un científico adquiere no solo conocimientos, pero una actitud mental que predomina en sus contactos con el ambiente que le rodea. Esto no es privativo de la ciencia, pero se aplica a todas las profesiones: el policía piensa como un policía las 24 horas del día (en inglés, es “street wise”), y el abogado o el médico analizan los lo hechos de acuerdo a sus experiencias profesionales. Este barniz que las distintas profesiones adquieren es algo que no se puede improvisar, excepto, desde luego, en ufología.

De cualquier manera, el proponente de una hipótesis determinada debería establecer explícitamente las bases de la misma, indicando la casuística usada, asi como las reglas que determinan si un caso es incluido o no. Como se vera más abajo, esto raras veces se cumple.

Es oportuno mencionar aquí los tres aspectos clásicos del fenómeno UFO: i) existencia; ii) origen; iii) propósito. 
Estas facetas son independientes, y deben ser dilucidadas en este orden. Como bien dijera el Dr Hynek. el fenómeno UFO se caracteriza por la persistencia de informes consistentes, cuyo contenido y validez debe ser estudiado independientemente de las hipótesis sobre su origen. Sin embargo, históricamente tal no ha sido el caso, y en la imaginación popular los platillos voladores aún se identifican como naves extraterrestres.


Las hipótesis
Desde el punto de vista más general, las explicaciones del fenómeno OVNI pueden ser divididas en tres grupos:

A) Positivistas: los OVNIs son reales
Es decir, existe un fenómeno distinto, al margen de la ciencia convencional, que debe ser explicado. En esta perspectiva muchas veces la explicación del fenómeno aparece mezclada con especulaciones sobre su origen.

B) Negativistas: los OVNIs no existen
Dejando de lado lo absurdo de esta postura (si algo no existe, ¿por que tratar de explicarlo?), varias alternativas son posibles:

(i) Todo es ilusión, un fenómeno de origen psicológico, alucinaciones de mentes dislocadas, quizás influenciadas por el medio sociológico que rodea al testigo y por el bagaje cultural del ambiente. Como dijera hace ya años un conocido ufólogo español, “El testigo se engaña a si mismo".

(ii) El incidente tiene realidad objetiva, pero no es un OVNI sino simplemente una interpretación errónea atribuida por el testigo a un fenómeno natural que le es desconocido. Es decir, “El testigo es engañado” por las circunstancias.

C) Parciales
Estas hipótesis solo intentan explicar un aspecto particular del fenómeno OVNI, real o imaginario, ignorando otras manifestaciones del mismo. En general, la casuística sustentando estas hipótesis está bien definida. aunque no es siempre accesible a la comunidad ufológica.


Este artículo discutirá la mayor parte de las explicaciones que han sido publicadas en la literatura del tema, que se resume en la siguiente tabla.


HIPOTESIS POSITIVAS

Hipótesis extraterrestre (HET)

Esta hipótesis ha cautivado la imaginación de los investigadores, y aunque su popularidad ha decaido en Europa, sigue aún siendo la explicación predominante en la ufología Americana. Las dos publicaciones de importancia en los EEUU, el IUR (INTERNATIONAL UFO REPORTER) y el MUFON UFO JOURNAL propagandizan la HET no solo en sus editoriales, pero asi mismo en la selección de artículos. El editor del IUR (J.K. Clark) ha escrito que la HET es “la más defendible desde el punto de vista científico, y la única explicación creible del fenomeno UFO". En cuanto al MUFON JOURNAL, su director (W.H. Andrus) por más de cuatro.años ha defendido contra viento y marea un notable y obvio fraude, simplemente porque si tal caso fuera cierto verificaría la HET.

Esencialmente, la HET puede enunciarse: los OVNIs son naves espaciales, provenientes del espacio exterior (i.e, fuera del sistema solar) que visitan la tierra por razones que no conocemos.

En principio, considerando que los informes de OVNIs aparentemente describen ingenios capaces de maniobras que exceden las posibilidades de nuestra tecnología, la HET parece ajustarse a la información existente. Sin embargo, un análisis más cuidadoso de las implicaciones de esta hipótesis pone en evidencia dificultades serias.

i)Las distancias

Las sondas espaciales lanzadas a los diversos planetas han verificado que no existe vida en el sistema solar. SI los UFOs son el producto tecnológico de una civilización avanzada, su origen debe situarse en el espacio exterior, es decir, provienen de las estrellas.

Pero las distancias a otras estrellas se miden en términos de años luz, lo que complica la logística de un viaje interestelar. Las entidades capaces de contemplar tal empresa deberán tener un período de vida muy superior a la nuestra, y transportar en su nave los alimentos y el combustible necesario para sobrevivir muchos años en el espacio. Desde luego, es posible soslayar tales dificultades con tecnología: el combustible puede ser extraido “en ruta” y los tripulantes hacer el viaje en animación suspendida. O más simplemente, la duración del viaje puede concebirse como reducida a cero si se realiza a través de una dimensión superior, como en la hipótesis de los universos paralelos.

Pero es inevitable pensar que éstos argumentos, si bien posibles dentro del marco de la ciencia, no son más que especulaciones, recursos de mal perdedor, que palidecen en vista de las otras objeciones presentadas por la HET.

ii)El propósito

¿Oué razones podrían impulsar a una civilización enormemente avanzada, como la que hemos esbozado, a emprender un viaje de tal magnitud? Sin duda tal empresa agotaría sus recursos materiales, y representaría una inversión de tiempo y talento difícil de justificar para simplemente visitar un planeta insignificante en un brazo secundario de la galaxia. Pues nuestro planeta no tiene nada que lo distinga, ninguna riqueza que otras culturas pudieran codiciar, aun si tuvieran la capacidad de montar una expedición interestelar.


La morfología

Como lo ha puntualizado Jacques Vallée, la morfología de las entidades que figuran en los incidentes es sospechosamente antropomórfica en la mayoría de los casos: dos brazos, dos piernas, cabeza con ojos una facilidad aparente para respirar nuestra atmósfera y moverse con soltura en el campo gravitatorio de la Tierra. Que tal desarrollo paralelo pueda haber ocurrido en otro lugar del universo no es imposible, pero ciertamente muy improbable, considerando las limitaciones impuestas por el entorno físico en la evolución biológica. Pero más improbable aun es que tal raza, explorando la inmensidad del espacio, nos haya encontrado accidentalmente.

Es posible aducir que los humanoides que aparentemente nos visitan pueden ser el producto de una ingeniería genética avanzada. especialmente diseñados para la exploración y/o la conquista del planeta Tierra. Tales especulaciones traidas por los cabellos realmente no apuntalan la HET, pero destruyen la credibilidad de las ideas promovidas por Budd Hopkins y sus discípulos, que se discuten más abajo.

Para cerrar la discusión de la HET. Es necesario recalcar que la pluralidad de los mundos habitados no puede ponerse en duda. El astrónomo Frank Drake de la Universidad de Cornell propuso una formula, hoy conocida con su nombre, que determina en forma matemática la probabilidad de existencia de otras civilizaciones. Pero la existencia de esas culturas y la realidad de que nos visiten son dos cosas distintas.


Hipótesis del sistema de control

Por muchos años el Dr. Jacques Vallée ha desarrollado en sus libros una hipótesis basada en las similaridades de las entidades que aparentemente tripulan los OVNIs tienen con otros seres de origen no humano descriptos par el folklore a través de las centurias, como por ejemplo; ángeles. demonios, incubos y silfos.

Para Vallée, los UFOs constituyen un sistema de control cultural, cuyo propósito es el preparar la raza humana para lo que el futuro pueda deparar. Detrás del fenómeno existe una inteligencia superior, tecnológicamente muy avanzada, y capaz de manipular el espacio-tiempo para servir sus propósitos. Esta inteligencia puede ser humana o foránea, o simplemente tener un origen natural.

El fenómeno OVNI tiene no solo una realidad física y objetiva, sino también un aspecto psicológico que podría manifestarse como el tan mentado inconsciente colectivo de Jung. En verdad, Vallée es un poco vago en lo que nos dice, lo que hace difícil una interpretación precisa de sus escritos.


Hipótesis sin nombre

Un cierto número de investigadores independientes trabaja activa y privadamente en el estudio de los OVNIs, con observancia estricta de la metodología científica que determina las siguientes etapas: i)definición del fenómeno a estudiar; ii) acumulación de datos, es decir, obtención de una muestra representativa; iii) ordenación y estudio; iv) formulación de hipótesis; v) predicción y confirmación; vi) formulación de teorías; y eventualmente, vii) determinación de un paradigma en el sentido definido por Kuhn.
Thomas Kuhn es autor de: THE STRUCTURE OF SCIENTIFIC REVOLUTIONS, University of Chicago Press, 1970.


Es un proceso largo y tedioso, que no da lugar para enunciar hipótesis a priori, y menos aún teorías, como lo han hecho los proponentes de algunas escuelas ufológicas. Las acumulaciones de datos, de las que hay muchas en la literatura no constituyen información sobre el fenómeno; la información solo resulta luego de la etapa (iii).

Estas son las actividades de varios grupos de investigadores entre los que se cuenta el proyecto UNICAT. Con el correr del tiempo, lo que son los UFOs, o lo que no son, surgirá de por sí, y una hipótesis o más podrán ser definidas y nombradas.


HIPOTESIS NEGATIVAS

Hipótesis socio-psicológica

Aunque el nombre de esta hipótesis parece un trabalenguas, las ideas de la misma son claras. Fundamentalmente, los OVNIs no existen. Todo lo que leemos en los miles de informes que los ufólogos han acumulado a través de los años no es más una versión distorsionada de hechos fácilmente explicables, alucinaciones, interpretaciones erróneas de fenómenos naturales, mistificaciones perpetradas por lucro o por diversión, o fantasías de mentes enfermizas. A esto se agrega la presión sociológica ejercida en el testigo por la cultura y el ambiente. Las causas verdaderas pueden ser casi siempre establecidas, y para aquellos casos en que la identificación no ha sido posible (el “residuo”, en la nomenclatura favorecida por esta escuela) un análisis más a fondo sin duda remediaría la situación.

En principio, hay cierta verdad en lo que los partidarios de la HPS proclaman, y es que la inmensa mayoría de los reportajes de sucesos OVNIs carecen de valor científico, y por tanto deben ser eliminados de los bancos de datos. En la experiencia de UNICAT, el porcentaje de casos reales de UFOs en catálogos de incidentes sin depurar (datos brutos), es del orden del 1 al 2%. Este número ha sido verificado más de una vez usando diversos listados existentes en la literatura, y por razones demasiado extensas para discutirlas aquí, no tengo la más mínima duda de su validez. Ese residuo es considerable, y esfuerzos reduccionistas solo incrementan el peso y valor científico del caso. Tal fueron las conclusiones del estudio comisionado por la Fuerza Aérea de los EEUU al Instituto Batelle.

Una de las dificultades encontradas por esta hipótesis es la imposibilidad de crear un banco de datos en que apoye las conclusiones. Por que si bien es cierto que un gran número de informes de UFOs tienen una causa psicológica, también es cierto que tales incidentes son reconocidos como tales por los ufólogos, e incorporados al mundo de los IFOs (objetos volantes identificados).

En estas circunstancias, el único camino es considerar los incidentes caso por caso. Este ha sido hecho por Monnerie, al menos en su primer libro, donde mediante una selección conveniente fue capaz de eliminar por una razón u otra todos los casos seleccionados. Este resultado era de esperar, puesto que los casos explicables exceden los casos de alta calidad casi por un factor de 100, y muchos de los casos en la literatura no han sido propiamente investigados. Pero Monnerie ha errado al tomar el paso siguiente, cuando razona que si los casos en su lista limitada han probado ser falsos, por tanto todos los casos son falsos.

Más recientemente (1979), Barthel y Brucker aplicaron la misma técnica en una obrita que tuve la oportunidad de analizar en detalle, donde a partir de un grupo de casos franceses que indudablemente son falsos, los autores generalizan el dogma de Monnerie, “les OVNIs n´existent pas”, primero a todos los casos en Francia, y luego, ¡a todos los casos del mundo!.

A pesar de este comienzo tan paupérrimo, las ideas de Monnerie han prosperado en Europa y en la América del Sur, aunque no en los EEUU donde la HET aún prevalece. Creo que han habido dos razones para esta aceptación. Primero, que llega un momento en que las personas que estudian el fenómeno se cansan de encontrar una mayoría de informes pobres y dudosos, al punto que los casos de alta calidad pasan desapercibidos. Esto era particularmente cierto antes del advenimiento de los ordenadores, pero lo es aún hoy día, porque como se puede apreciar en los listados que han aparecido en el mercado, los catálogos carecen de parámetros que determinen no solo la calidad de los casos, pero aún mismo la cantidad de información que contienen. Es fácil de comprender que en esas condiciones los investigadores pierdan fe en la realidad del fenómeno, simplemente por no tener acceso a un banco de datos propiamente diseñado, o a la literatura básica. Y la imagen mental que se han formado de sus lecturas solo evoca una infinidad de casos falsos.

Buscando una explicación más profunda de por que un investigador se desencanta con el tema, he confeccionado una lista de ex-ufólogos que se han plegado a la escuela socio-psicológica del amigo Monnerie. Aunque Francia ha sido la cuna del movimiento, no todos los convertidos son franceses y así tenemos, entre otros: Monnerie, Barthel y Brucker (Francia), González (España), Van Utrecht (Bélgica), Fuller (Inglaterra), Toselli (Italia) y Agostinelli (Argentina). Además de una postura militante anti-platillista, una característica común de estos autores es la carencia de una formación científica. Por tanto, les es imposible comprender la lógica falsa de las generalizaciones que proclaman. Explica también la insistencia casi obsesiva con que se refieren al fenómeno UFO como el “mito OVNI”, estableciendo como hecho lo que es solo una opinión.

Y a todo esto, Si los OVNIs no existen, ¿cual es la necesidad de probarlo? Quizás los partidarios de esta teoría no están tan convencidos como nos dicen, y por eso han fallado en demostrar la no existencia de los OVNIs de una manera convincente, en la misma forma que los que defienden la HET no han podido obtener una prueba incontrovertible de que los ingenios que aparecen en la atmósfera vienen del espacio exterior.

A título informativo, el análisis de los datos almacenados en UNICAT, no ha producido evidencia hasta el momento en favor o en contra de la HET, aunque si indicaciones negativas con respecto a la HSP.


Escepticismo absoluto

El escepticismo con respecto a los UFOs forma parte de la filosofía del CSICOP ( Committee for the Scientific Investigation of Claims of the Paranormal), grupo que ataca duramente todas las manifestaciones que no forman parte de la ciencia ortodoxa. El más conocido exponente de la vertiente anti-ufológica es Phil Klass, autor de varios libros negativos y al mismo tiempo editor de la prestigiosa revista AVIATION WEEK AND SPACE TECHNOLOGY. Las ideas anti-ufológicas de CSICOP ni siquiera pueden caracterizarse como hipótesis. Los OVNIs no son el producto de aberraciones sociológicas o psicológicas: simplemente no existen. El testigo no reconoce un fenómeno natural, o simplemente interpreta equivocadamente lo que ve. No hay una vaga acusación sobre la sanidad del observador, como en el caso de la HSP, pero a veces dudas sobre su competencia o veracidad. Para descubrir las causas detrás del avistamiento, todo lo que se necesita es una investigación cuidadosa.

En vez de generalizaciones arbitrarias, como en la HSP, los miembros de CSICOP conducen sus investigaciones caso por caso, seleccionando los mismos en función de la publicidad que han recibido. En algunos incidentes, el resultado es positivo y la explicación es satisfactoria. En otros, la explicación es rebuscada y poco satisfactoria. Lo que se destaca, sin embargo, es la metodología defectiva: porque aún, si todos los casos investigados por CSICOP fueran explicados -que no lo son- la posibilidad siempre existe que entre los miles no estudiados puedan existir casos cuya validez sea indisputable


OVNIs y la ciencia ficción

Esta presentación no sería completa si no se mencionaran aunque solo sea brevemente las ideas de Bertrand Méheust relacionando el fenómeno UFO con la mitología y el floklore. Básicamente, las descripciones de ingenios y eventos que recogemos de lo testigos, han aparecido previamente en la ciencia ficción, como si otra cultura hubiera instalado los conceptos en las mentes de los autores de una era anterior a los UFOs. Las similitudes de esta posición con las ideas de Vallée deben ser notadas.


HIPOTESIS PARCIALES

Un cierto numero de las hipótesis que han sido sugeridas para explicar el fenómeno OVNI son solo parciales, pues se limitan a un aspecto particular del problema ignorando otras facetas claramente inconsistentes con la explicación propuesta. Por lo mismo, estas hipótesis han caído rápidamente en desfavor excepto por el limitado núcleo de proponentes.


Hipótesis del trauma natal (HTN)

Propuesta por Alvin H. Lawson, un profesor de inglés en la Universidad del Estado de California, establece que los elementos que caracterizan las narrativas de abducciones no son otra cosa que memorias latentes del proceso natal, revividos durante los trances hipnóticos usados para investigar tales sucesos.

Para probar sus ideas, el Dr. Lawson lleva a cabo una serie experimentos en los cuales sujetos que no habían tenido realmente una abducción reprodujeron, bajo hipnosis, las mismas descripciones que aquellos cuyas experiencias eran consideradas reales.

El trabajo de Lawson tiene grandes problemas, empezando por la falta de credenciales del proponente. El número de participantes en el proyecto fué muy pequeño, y el protocolo preciso del experimento no fue nunca propiamente publicado, limitaciones que no fueron obstáculo en su momento para la constitución de un grupo de prosélitos. Es interesante destacar que las ideas de Lawson fueron favorecidas principalmente por los enemigos de la HET.

Desde el punto de vista científico, la HTN es falseable, es decir, es posible diseñar un experimento demostrando su imposibilidad. De hecho, ni siquiera es necesario realizar tal experimento: la casi totalidad de los seres humanos han tenido nacimientos naturales, pero solo una minoría infinitesimal afirma haber sido abducidos, lo cual falsifica la HTN de una manera irreversible.


Hipótesis geofísica (HGF)

Esta hipótesis considera manifestaciones lumínicas en la proximidad del suelo, que son atribuidas al campo electromagnético generado por efectos piezoeléctricos resultantes de presiones y movimientos en la corteza terrestre.

El efecto puede ser observado como un globo luminoso real moviéndose en la vecindad de un área de actividad sísmica, o en una versión más elaborada, el campo electromagnético actúa directamente en el cerebro del testigo, quién, en efecto, cree percibir un fenómeno que no tiene realidad objetiva. El mecanismo de esta interacción no ha sido explicado.

La hipótesis postula una correlación estadística entre terremotos y los avistamientos de OVNIs, es decir, el número de incidentes reportados sería mayor en áreas sísmicamente inestables, incrementándose en función de la actividad de las mismas

Los proponentes de la hipótesis han tratado de verificar esta correlación, pero los resultados dejan mucho que desear. En un intento de mejorar las estadísticas, el área de influencia fue extendida a cientos de kilómetros, y más aún, la distribución temporal fue también expandida a meses antes y después del episodio sísmico.

Además de la falta de correlaciones estadísticas convincentes, la HGF tiene otras dificultades, pués solo considera un tipo muy restringido de manifestaciones luminosas. Esto no es aparentemente un problema para aquellos que afirman que los UFOs no existen, pues solo es necesario postular que el fenómeno es debido a una diversidad de causas, que solo los ufólogos insisten en encasillar en una categoría única.

Otra vez es necesario destacar la importancia de definír adecuadamente el problema que se desea estudiar, pues hay evidencia de que esos efectos piezoeléctricos realmente existen.

Pero tales incidentes no satisfacen la definición de UFO propuesta por el Dr. Hynek, y no pueden explicar los casos en que los incidentes ocurren en la atmósfera, como por ejemplo, aquellos reportados por pilotos.

Desde el punto de vista del proyecto UNICAT, en ninguno de los 800 casos examinados hemos encontrado una correlación indisputable con actividad sísmica.


Los Universos Paralelos

Esta explicación del fenómeno OVNI no es realmente una hipótesis formal, pero tiene el mérito de conectar los UFOs con ciertos aspectos esotéricos de la física teórica. Como lo indicara el Dr. Hynek, el fenómeno UFO es localizado en tiempo y espacio; un gran número de incidentes ocurren en un entorno limitado (45% de los casos en UNICAT) y terminan subitamente, creando en el testigo la impresión de que han dejado de existir.

Otra indicación de que algo extraordinario tiene lugar en la presencia y/o vecindad de un OVNI es lo que Jenny Randles ha llamado el "factor OZ". Este nombre identifica una serie de síntomas narrados por las victimas de abducciones y caracterizadas por una impresión de disociación, de "haber dejado temporariamente el mundo material" y haber entrado en otro lugar con las cualidades de los sueños, gobernado por reglas mágicas. El factor OZ, de acuerdo con Randles, se establece y cesa rápidamente.

Estas anomalías serían fácilmente explicables postulando que se trata de objetos físicos capaces de desplazarse entre universos de tres dimensiones, adyacentes en una cuarta dimensión espacial. Este concepto es fácil de entender considerando un ejemplo. Las páginas de un libro tienen dos dimensiones, y para ir de un ángulo al opuesto, entidades constreñidas a permanecer en ese universo solo pueden hacerlo moviéndose sobre la página. Pero desde nuestro punto de vista tridimensionado, el mismo efecto puede obtenerse simplemente doblando la pagina (en la 3a. dimensión) de manera tal que los ángulos opuestos se toquen. Utilizando la 3a. dimensión espacial, pues, la gran distancia entre los extremos de la página han desaparecido. Desde el punto de vista matemático la generalización a cuatro dimensiones no ofrece dificultades, asumiendo espacios ordinarios de tres dimensiones, adyacentes en la 4a. dimensión espacial en la misma forma que las páginas del libro son paralelas en la 3a. dimensión.

Desde luego, en el presente estado de la ciencia estos conceptos son solo teóricos. Pero es concebible que civilizaciones más avanzadas tengan el conocimiento y la tecnología necesaria para llevarlo a la práctica. Por tanto, esta posibilidad debería ser bien recibida por los proponentes de la HET, dado que aparentemente resolvería una de las dificultades de tal hipótesis, a saber, la magnitud de las distancias interestelares.


Hipótesis del experimento genético

Esta hipótesis ha sido desarrollada por Budd Hopkins, un artista bien conocido, y su discípulo el profesor de historia Dr. David Jacobs, y mantiene que las abducciones son evidencia de un experimento genético conducido por una raza al borde de la extinción. De acuerdo con los proponentes, el propósito es la obtención de óvulos y esperma a los efectos de crear una raza híbrida.

La hipótesis, por tanto, postula un origen extraterrestre, así como una identidad biológica permitiendo la hibridización, concepto que la mayor parte de los biólogos consideran aberrante. Estas consideraciones no han afectado a los proponentes, que carecen totalmente de credenciales científicas, pero las ideas han sido bien recibidas por los partidarios de la HET.

Esta "hipótesis" ha sido incluida por minuciosidad, no por sus méritos intrínsecos. El defecto más marcado de esta idea es que ignora el carácter regional de las abducciones, fenómeno que ha sido registrado casi exclusivamente en América.